Este desarrollo se apoya en los estándares de Transferencias 3.0 del BCRA, que garantiza la interoperabilidad obligatoria. A esa infraestructura regulada, la fintech le suma su propia capa de tecnología agregada con la inclusión de conversión instantánea de moneda según preferencias del usuario, integración con liquidez cripto y stablecoins, así como conciliación y disponibilidad en múltiples monedas (ARS, USD, BRL, BTC).
“Con este QR interoperable buscamos que pagar sea tan simple como enviar un mensaje, sin importar de qué QR se trate. Es una herramienta clave para romper barreras entre plataformas y hacer que la gente pueda vivir en cripto todos los días”, afirmó Manuel Beaudroit, CEO y cofundador de belo.
En un contexto en el que el QR interoperable representa actualmente el 96,3 % del total de operaciones con transferencia (58 millones de transacciones en febrero 2025, +138 % interanual, según el BCRA), esta funcionalidad aparece como un paso hacia la democratización de los pagos digitales a partir de tres pilares: la posibilidad de operar con multimonedas (pesos, reales, dólares digitales y/o criptomonedas); comisiones optimizadas que redundan en mejores condiciones para comercios, freelancers y operaciones cross-border; y liquidez global inmediata por su integración con Pix, Lightning Network y cuentas multidivisa.
Con más de 3 millones de descargas y presencia activa en Argentina, esta wallet nacida en 2021 fue gran protagonista en el verano gracias a que su integración lograda con Pix - el sistema de pagos instantáneo creado por el Banco Central de Brasil - que permitió a los turistas argentinos enviar, recibir y pagar en reales sin comisiones y con acreditación inmediata. Su nuevo despliegue está en fase de soft launch entre usuarios que ya reciben pagos en la app, y se prevé su liberación progresiva durante el tercer trimestre de 2025, con escalamiento posterior hacia Brasil y Uruguay.
La fintech proyecta incorporar entre 2.000 y 5.000 comercios activos durante el primer trimestre post-lanzamiento, con foco en freelancers y profesionales que reciben pagos del exterior, personas que quieren usar sus cripto en la vida cotidiana, comercios con fricción cross-border (turismo, retail de lujo, gastronomía) y negocios que busquen alternativas de cobro más flexibles y eficientes. De esta forma, refuerza su objetivo de simplificar el uso del dinero en todo el mundo al construir una infraestructura de pagos abierta, flexible y global, en el que las fronteras entre dinero fiat y cripto, local e internacional, cada vez tenga menos sentido.