Compras con débito y PIN: una buena (de Chile) y una mala (de Brasil)

Mauricio Naranjo: "Yo viví un año y medio en Santiago de Chile y la verdad que me pareció una cosa fantástica poder andar sólo con la tarjeta de débito en el bolsillo, cargando la menor cantidad posible de efectivo. Con la gran bancarización que hay en Chile uno paga con la de débito en todos lados, hasta en el metro y colectivos. La mayoría de los quioscos tiene (terminales) Pos. Allá se maneja sólo con Pin y eso también lo hace mucho mas práctico. Sólo uno debe conocer su Pin y por más que la cajera quisiera, la compra no se acredita si no se ingresa esa clave. Acá es conocido que compran con tarjetas robadas porque o no le piden el DNI o conocen a algún cajero de algún comercio. Entonces yo no sé hasta que punto es mas seguro con DNI y firma".

Laura Covaro: "Mi experiencia en ese sentido no fue buena en Brasil porque después de una compra con tarjeta de débito me `clonaron´ los datos de la misma (entiendo que también el PIN) y los utilizaron para hacer extracciones del cajero automático. Quizás debería ser como el sistema de red Link, que te pide utilizar 2 pins, uno para compra y otro para extracciones en cajero (aunque eso implique recordar ambos números)".

Sobre compras con tarjeta de débito, restricciones de los comercios y seguridad, aquí.

Midory produce hasta 20.000 paquetes de hortalizas por semana (la apuesta de Sergio Guillaumet por la hidroponía en Córdoba)

(Por Juliana Pino) Cuando en 2003 la soja tocaba los 600 dólares y el campo argentino parecía vivir un momento dorado, Sergio Guillaumet tomaba una decisión contracorriente: dedicarse a producir verduras sin tierra. No tenía campo, tampoco un pasado familiar ligado al agro, sino apenas un título de Licenciado en Administración de Empresas y una idea que lo desvelaba: fundar su propia compañía.