Con su Salón de Diseño itinerante, Fimar abrió sus puertas al público.

A nadie se le ocurriría usar el mismo par de zapatos durante 20 años. Pero en cambio, a la hora de comprar muebles optamos por algo “para toda la vida”. Es este concepto el que se proponen erradicar los responsables de la Feria Internacional del Mueble Argentino (Fimar), iniciativa impulsada por las Cámaras de la Madera de Córdoba, San Francisco, Río Cuarto y Cañada de Gómez (Santa Fe), que ya lleva 3 ediciones.
“De lo que se trata es de concebir a los muebles también como objetos de moda, que marcan tendencia y por lo tanto tienen que evolucionar”, explica Gustavo Viano, presidente de la Cámara de la Madera de Córdoba.
A esto apunta precisamente el Salón de Diseño que se presentó en el marco de la Feria y que recorrerá otras ciudades del país a lo largo del año, empezando por Rosario en el mes de agosto y culminando en Buenos Aires hacia finales de año. El espacio estará abierto al público (Fimar es sólo para operadores del sector) y será una vidriera para el diseño de muebles con tonada local. ¿Una novedad? Las mesas y sillas elaboradas con madera de descarte merecen darse una vuelta por el Complejo Forja donde se desarrollar la exposición hasta el sábado.

Riderboost, la startup cordobesa que potencia a los repartidores con un kit eléctrico para su bicicleta (ya trabaja con PedidosYa!)

(Por Rocío Vexenat) En plena pandemia de 2020, dos jóvenes cordobeses de apenas 23 años, Matías y Lautaro, idearon un proyecto con una meta clara: ofrecer una alternativa de movilidad más segura y sustentable. Así nació Riderboost, un emprendimiento tecnológico que convierte cualquier bicicleta convencional en una bici eléctrica mediante un kit de instalación rápida. Ya trabajan con PedidosYa! y sueñan con ser la startup de micromovilidad más grande de Latinoamérica.

18 de agosto: Día Mundial del Pinot Noir, y una joya para brindar

Este lunes 18 de agosto se celebra el Día Mundial del Pinot Noir, una ocasión perfecta para honrar una variedad famosa por su elegancia, sutileza y expresión del terroir. Y, qué mejor manera de hacerlo que con un espumante rosado que captura toda la gracia de esta uva: Rosell Boher Rosé.