Sobre espacios que recomiendan no usar celular y los fanatismos de ambos extremos

Maria: "¡Dios mío! ¿A dónde queremos ir? Edificios donde están prohibidos los niños, restaurantes donde te prohiben usar el celular, boliches que cierran a las 5, y así un montón de cosas. Me asusta leer este tipo de notas y más los comentarios (NdelE: Interrumpo acá porque ningún edificio prohibe los niños y el Sibaris sólo sugiere no usar el celular... no manipulemos la información, por favor). ¿No les parece que sólo es cuestión de educación? ¡La educacion te libera! ¡Por qué todo prohibir! Me niego a que me prohiban hacer lo que tengo ganas, si gracias a mi educación no molesto a nadie. Si quieren estar tranquilos (sin chicos alrededor, sin escuchar celulares, sin ruido de boliches, etc.) vayan a vivir a lo más alto de una montaña. ¡Me asombra ver lo amargada que vive mucha gente! Agradezco ser tolerante y disfrutar la vida". (NdelE: Enhorabuena que disfrutes la vida, María... genial. El tema es que como vivimos en sociedad hay límites que se van corriendo, ajustando y siempre estarán en algún grado de tensión. Por mi parte, me parece bien que algunos lugares sugieran no usar celular y -en cambio- que directamente se prohiba fumar en lugares cerrados".

Un lindo tema para expresarnos, aquí.

Riderboost, la startup cordobesa que potencia a los repartidores con un kit eléctrico para su bicicleta (ya trabaja con PedidosYa!)

(Por Rocío Vexenat) En plena pandemia de 2020, dos jóvenes cordobeses de apenas 23 años, Matías y Lautaro, idearon un proyecto con una meta clara: ofrecer una alternativa de movilidad más segura y sustentable. Así nació Riderboost, un emprendimiento tecnológico que convierte cualquier bicicleta convencional en una bici eléctrica mediante un kit de instalación rápida. Ya trabajan con PedidosYa! y sueñan con ser la startup de micromovilidad más grande de Latinoamérica.

18 de agosto: Día Mundial del Pinot Noir, y una joya para brindar

Este lunes 18 de agosto se celebra el Día Mundial del Pinot Noir, una ocasión perfecta para honrar una variedad famosa por su elegancia, sutileza y expresión del terroir. Y, qué mejor manera de hacerlo que con un espumante rosado que captura toda la gracia de esta uva: Rosell Boher Rosé.