Basta de números y proyecciones: llegan los momentos en los que hay que compartir

(Por Rubén J. Ullúa – Analista de Mercados Financieros – Twitter: @Ullua) Nos acercamos al cierre de año y dado que las próximas dos semanas estaremos ya en pleno festejo, ésta será mi última columna para el 2014 y mucho pensé hacia donde orientarla. En estas épocas es habitual que hagamos balance de lo que pasó y también proyecciones de lo que vendrá: Sin embargo me pareció interesante cambiar el rumbo de lo habitual, ya que lo podemos dejar para las columnas de comienzos del 2015, y orientar la de hoy a la reflexión. Veamos…

La vorágine en la que vivimos a diario, por la carga laboral y por las diferentes obligaciones que tenemos, cada vez nos quita más tiempo de compartir con nuestras familias y si bien hacemos un gran esfuerzo por recompensar ese tiempo perdido, muchas veces terminamos sólo cubriendo espacios, pero no llenando espacios.

Obviamente que en esa carrera diaria hacia el… vaya saber a qué lugar…, entre los más afectados se encuentran sin ninguna duda nuestros hijos, ya que cada vez contamos con menos tiempo para compartir con ellos y aún cuando los llenemos de regalos y sorpresas, les terminamos quitando lo más valioso para ello que es el tiempo de compartir con nosotros.

Una vez, escuchando al reconocido neurocirujano Facundo Manes, entre las tantas cosas interesantes que nos enseña con todo su conocimiento sobre el cerebro humano, comentó que las cosas que más quedan en el recuerdo para nuestro cerebro son aquellas que generaron emociones en nosotros.

Tomando esta información tan valiosa, les propongo el siguiente ejercicio: pensemos por un momento en nuestra infancia e identifiquemos los mejores momentos vividos y nos daremos cuenta que habitualmente esos momentos no están asociados al juguete que nos regalaron, al helado que nos compraron, sino que lo más probable sea que lo asociemos a los momentos más simples compartidos con nuestros seres queridos.

En este sentido, dado que estas fechas suelen ser de balances, proyecciones pero también de reflexión, preferí en esta columna sólo abocarme a esto último, es decir a la reflexión, y compartir con ustedes un video muy interesante que hizo una empresa sueca de muebles Ikea, con sede en España, quien realizó un experimento llamado “La otra carta”, que fue compartido en YouTube, en el que muestra cuáles son los verdaderos regalos que necesitan los niños de sus padres para esta Navidad.

Es habitual que los padres pensemos mucho en qué regalarles para la Navidad a los chicos, pensando qué es lo que los hará felices y del experimento que realizó esta empresa, podemos ver el resultado de lo que ellos piensan y puede que muchos se sorprendan y otros no tanto, pero sin ninguna duda nos ayudará a reflexionar.

 

Les envío un gran saludo a todos los lectores, agradezco enormemente a Infonegocios por el espacio que nos brinda para estar en contacto y compartir ideas y visiones. ¡Felices fiestas y pongamos toda la energía para que los argentinos tengamos un excelente año 2015!

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