El promedio de sueldo transferido fue de $ 1.483.740, un aumento del 36% respecto al año pasado, por encima de la inflación oficial del 31%. Es decir, en términos reales, la plata alcanza un poquito más, aunque no para todos.
¿Qué rubros se llevan “la mejor tajada”? Mientras ciertos sectores se llenan de billetes, otros siguen mirando desde abajo y esperando su oportunidad:
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Minas y Canteras: $ 4.700.000 (es el top del top, con suba del 59% interanual).
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Info y Comunicaciones: casi $ 2.000.000.
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Banca y Finanzas: $1.500.000.
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Industria manufacturera: $1.280.000.
Los sectores que menos pagan son Comercio ($ 1.300.000 millones), Construcción ($ 1.000.000) y Transporte ($ 1.190.000), aunque todos subieron con fuerza respecto al año pasado.
Brecha salarial por provincia
Los números muestran que no todos los sueldos en Argentina son iguales: mientras algunas provincias, sobre todo las del sur, lideran con salarios altísimos gracias a la minería y la energía, otras quedan muy atrás:
1- Neuquén: $ 2.650.000.
2- Chubut: $ 1.790.000.
3- Santa Cruz: $ 1.680.000.
4- Río Negro: $ 1.680.000
5- Jujuy: $ 1.600.000.
Del otro lado del ring están las provincias que la pelean con salarios mucho más bajos. Aquí, la diferencia con Neuquén es brutal: algunos trabajadores apenas cobran un tercio de lo que gana un neuquino promedio:
1- La Rioja: $ 841.000.
2- Santiago del Estero: $ 449.000.
3- Corrientes: $ 728.000.
4- Tucumán: $ 848.000.
¿Y qué pasa en la Capital y GBA? CABA ronda en los $ 1.590.000 y Buenos Aires provincia los $ 1.290.000 millones.
Ahora, ¿qué sucede con las transferencias?
En el informe de Interbanking se puede ver un crecimiento sostenido tanto en montos como en operaciones. Durante el mes se procesaron 2.3 millones de transferencias, por un total de $ 3.5 billones, y el sueldo promedio nacional alcanzó los $ 1.483.740, con una variación interanual del 35,9%, superando la inflación del período (31,3%).
¿Qué nos dice esto? Que la bancarización sigue en alza: en los últimos cinco años, la cantidad de transferencias creció 55%, impulsada por la digitalización de empresas de todos los tamaños.
En resumen, lo que muestran los números es claro: en Argentina no todos ven la misma plata. Mientras Neuquén y las provincias mineras se llenan de billetes, otras regiones siguen rezagadas. Al mismo tiempo, cada vez más sueldos se cobran por cuenta bancaria y algunos hasta en dólares, un reflejo de que la digitalización y el bimonetarismo empiezan a ser una realidad que cambia la forma de cobrar en el país.
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