La empresa nación en 2018 de la mano de Agustín Korman y Javier S. Nougués, Bonalma surgió a partir de una pregunta: “¿Cómo puede ser que un país productor de trigo como Argentina no tenga una marca premium de pastas secas al nivel de Italia?” Esa inquietud fue el punto de partida de un proyecto que hoy ya cuenta con más de 5 millones de unidades vendidas y presencia en las principales cadenas de supermercados de la región.
Korman y Nougués, ambos con más de dos décadas en el mundo del consumo masivo, uno desde la industria alimentaria local y el otro desde Estados Unidos, detectaron que las pastas secas seguían atadas al precio y al volumen, sin un diferencial real de calidad.
Luego de un relevamiento que los llevó a recorrer más de 100 supermercados entre EE. UU. y Tierra del Fuego, definieron la esencia de la marca: una pasta argentina con calidad italiana, elaborada con sémola 100% de trigo duro nacional y procesos de excelencia.
El salto regional
Desde que sus productos llegaron a las góndolas argentinas, Bonalma no dejó de crecer. En 2019, apenas un año después de su lanzamiento, obtuvo el Superior Taste Award del International Taste Institute de Bruselas. Actualmente, el 50% de su producción se exporta, con presencia en cadenas como Carrefour Brasil, Tata Uruguay y Super G Chile, además de los principales supermercados argentinos: Coto, Disco, Jumbo, Carrefour, La Anónima, Chango Más y Pedidos Ya Market.
Lejos de conformarse con el éxito inicial, la compañía amplió su portafolio con sémolas 100% de trigo duro, elegidas por reconocidos chefs y restaurantes, y recientemente presentó su producto estrella: los Gnocchis de Papa Bonalma, resultado de dos años de desarrollo.
Con un 85% de papa y sémola de trigo duro, este lanzamiento busca elevar una receta tradicional a un nuevo estándar de calidad dentro del segmento premium.
“Nuestro plan es duplicar el volumen de ventas en los próximos años y seguir creciendo en nuevos mercados de la región, acompañados por nuevas líneas de productos”, explican sus fundadores.
Un proyecto argentino con respaldo y proyección
Con una inversión inicial de US$ 500.000 y el respaldo de referentes del sector agropecuario, como Ignacio Lartirigoyen, Hijas de Juan A. Harriet y Delfino Llobet, Bonalma consolidó una base sólida para escalar producción y distribución en toda la región.
Tu opinión enriquece este artículo:
Mónica Elisabeth Sacco :
Si lograron producir un trigo de grano duro como el italiano, y un proceso de secado de la pasta adecuado (no acelerado sino lento), la pasta será un verdadero éxito.