Qué está pasando...

La cordobesa Vortex adquiere a la colombiana Singulares SAS (con alcance en Ecuador, Venezuela y Perú)

Vortex, compañía especializada en soluciones digitales e innovación, adquirió a su par colombiana Singulares SAS, que se transformará en sede de Vortex Andina para centralizar las operaciones en Colombia, Ecuador,Venezuela y Perú. Esta inauguración se suma a la de Vortex Centroamérica, con sede en Costa Rica, que comprende a los mercados de El Salvador, Guatemala, Nicaragua y Panamá.

Image description
Jorge Nieves, director de Innovación de Vortex

Jorge Nieves, Director de Innovación de Vortex, explica que “trabajamos en la región desde hace 20 años, y con el aporte de Singulares tenemos una gran oportunidad para desarrollar toda la experiencia de la compañía en soluciones digitales para los sectores de Finanzas, Industria, Retail y Turismo, mercados que conocemos muy bien y en donde tenemos una vasta experiencia”.

Al frente de Vortex Andina estará Mauricio Vélez como director-socio, fundador de Singulares SAS,  quien tendrá la responsabilidad de conducir la operación y establecer la estrategia de crecimiento en la región. “Estamos muy  contentos de ser parte de la familia Vortex. Sin duda ahora tenemos la oportunidad de expandir nuestra oferta de soluciones y sumar valor al servicio que brindamos a nuestros clientes”.
 


A partir de la adquisición de Singulares, los planes de Vortex Andina incluyen la creación de un centro de desarrollo en Bogotá, Colombia, la incorporación de recursos y la ampliación de servicios a sus clientes. “El plan estratégico desde el inicio fue hacer de Vortex una compañía con proyección internacional y es lo que estamos llevando a cabo”, resume Jorge Nieves. 
 

Tu opinión enriquece este artículo:

Te puede interesar:

Nota Principal

Midory produce hasta 20.000 paquetes de hortalizas por semana (la apuesta de Sergio Guillaumet por la hidroponía en Córdoba)

(Por Juliana Pino) Cuando en 2003 la soja tocaba los 600 dólares y el campo argentino parecía vivir un momento dorado, Sergio Guillaumet tomaba una decisión contracorriente: dedicarse a producir verduras sin tierra. No tenía campo, tampoco un pasado familiar ligado al agro, sino apenas un título de Licenciado en Administración de Empresas y una idea que lo desvelaba: fundar su propia compañía.